La estabilización de taludes es un conjunto de técnicas y medidas que se utilizan para garantizar la estabilidad y seguridad de un talud o ladera. Los taludes son laderas naturales o artificiales que se utilizan en la construcción de carreteras, túneles, puentes, canales y otras estructuras. La estabilización de taludes se realiza para prevenir deslizamientos, desprendimientos y otros tipos de colapsos que puedan poner en peligro la integridad de la estructura y de las personas que se encuentran cerca.
Hay varias técnicas de estabilización de taludes, incluyendo la inyección de cemento, la colocación de geotextiles, la instalación de sistemas de drenaje y la construcción de muros de contención. Cada técnica se utiliza en función del tipo de suelo y de la geometría del talud.
Es importante llevar a cabo una adecuada estabilización de taludes para garantizar la seguridad y la durabilidad de las estructuras que se construyen en ellos. La estabilización de taludes requiere de un equipo especializado y de una buena planificación para garantizar que se lleve a cabo de forma adecuada.